Si existiera un lugar donde tan sólo hubiese alegría; allí, viviría mis sueños en plenitud! Desbordaría mi fantasía, y bailar sería mi mejor modo de caminar. Me lanzaría al mar, descubriría su magia, y sus juegos de luces; la vitalidad, la velocidad de mi paso, y mi respiración y pensamiento, sólo dependerían de aquel instante. Dejaría que todas mis emociones rebosaran y me llevasen al límite.
Olga Kobékina publica un nuevo vídeo, inspirado en la música de Debussy. Esta vez, nos lleva a un lugar lejano, utópico, casi irreal, donde reina la felicidad. Pero para llegar a esta isla, tenemos que atravesar las aguas poderosas del océano...
Dado las circunstancias, los artistas no tienen otro remedio que buscarse otros medios de expresión, y Kobékina opta por lo audiovisual.